VIOLETA PARRA SANDOVAL
Hace 100 años nació en la Provincia de Ñuble esta mujer, dueña de un talento maravilloso en la palabra y la música.
Tuvo una infancia marcada por la pobreza, pero su riqueza mayor fue su facilidad para expresar el arte popular chileno con exactitud fidedigna.
También logró leer el sentimiento de la gente, especialmente del más débil, del más sufrido y nos conectó con la sabiduría campesina que nace en la madre tierra, en este suelo que Dios nos dio como Patria.
Recorrió “playas, desiertos, montañas y llanos” para recoger el canto y el toquío del campo y lo llevó a la guitarra, al bombo y a la guitarrilla junto con el corazón sensible y justiciero.
Sus canciones han sido repetidas y elogiadas en todo el mundo, han cantado sus versos en todos los idiomas, interpretado su música prestigiosas orquestas de los países más cultos.
Violeta nos ha dejado un legado invaluable, mientras estuvo con nosotros no se valoró y hoy que ya no está, nos damos cuenta de todo lo que hizo por la cultura popular y el folklore chileno.
Violeta Parra fue una gran observadora de su entorno, el haber crecido rodeada de naturaleza en plena zona central, le dio la sensibilidad propia de quien ama su tierra…
Estudiantes de enseñanza básica y media, interpretaron para sus compañeros en el auditorio, durante la jornada del martes 03 de octubre, las creaciones de Violeta
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Departamento de Artes Imlp